En la villa de Ares, el magosto se hace solidario. Por segundo año consecutivo, la fiesta de bienvenida al otoño se aprovecha para sacar lo mejor de cada uno y, con la disculpa de reunirse, comer castañas y pasar una tarde distinta, los vecinos secundaron masivamente la propuesta del Concello
Leer Máis( 12 Novembro 2012 - 11:55 )